¿Por qué medir la calidad ambiental de tu municipio?
Hablábamos de la calidad ambiental y de cómo puede medirse, pero ¿por qué es importante hacerlo?
Cómo decíamos la calidad ambiental depende de factores diversos entre los que se encuentran los ambientales. Pero también están los factores sociales, económicos y culturales. Al final, todo es determinante para mejorar la calidad de vida en tu ciudad.
Medir la calidad ambiental
Uno de los factores que más preocupa a los ciudadanos es la salud. Cada vez, la sociedad está más concienciada con la necesidad de incluir hábitos de vida saludable para vivir mejor. Pero estos hábitos se ven directamente influenciados por el entorno. Y este, se ve modificado por el clima.
El ámbito urbano es heterogéneo en función de su ubicación geográfica. Sin embargo, algunos aspectos son comunes a todas. Así, algunas similitudes son, por ejemplo, aquellas relacionadas con las temperaturas. Las ciudades tienden a tener una temperatura mayor que las zonas rurales cercanas. Esto es así por el tráfico y por los modelos urbanísticos.
Movilidad y urbanismo
Por un lado, el tráfico rodado genera gases y partículas contaminantes que conforman una “boina” sobre la ciudad. Esta cubierta contaminante retiene el calor que el asfalto y otras superficies acumulan durante el día, aumentando así la temperatura ambiente. Por otro lado, la planificación urbanística (alta densidad de edificios y baja densidad de zonas verdes) hace que los flujos de aire en la ciudad sean estáticos. De este modo, los gases de efecto invernadero acumulados en la urbe no se disipan haciendo que la temperatura aumente.
Calidad de vegetación
Otro aspecto común a muchas ciudades es la baja densidad de vegetación por ciudadano. Según la OMS la ciudad ideal debería tener entre 10 y 15 metros cuadrados de área verde por residente. La vegetación urbana funciona como termorregulador y como filtro del aire. Pero, además, influyen en la salud de la población. Estudios han demostrado que aumenta la energía y la velocidad de recuperación en pacientes y ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, mejorando la salud mental de la gente.
Comunidades saludables
Otro motivo para considerar medir la calidad ambiental de un municipio está relacionado con los beneficios psicosociales que reporta a sus habitantes. Así, los parques y jardines son los espacios públicos donde se establecen relaciones sociales. Ante la falta de estos, y de otros espacios comunes, las sociedades se individualizan. Las poblaciones con lazos sociales más fuertes son comunidades más saludables, resilientes e igualitarias.
En cuanto al freno a las desigualdades, los árboles también tienen algo que aportar. Hemos explicado que funcionan como termorreguladores, disminuyendo la temperatura durante los períodos calurosos y aumentándola durante los meses fríos. Esto supone un ahorro energético de entre un 20% y un 50% en las viviendas que viven en zonas con mayor densidad de vegetación urbana.
Soluciones basadas en la naturaleza
Muchos son los municipios que han buscado la forma de incluir la vegetación en la nueva planificación y regeneración urbana. Aquellos que cuentan con un cauce cercano han optado por la renaturalización de estos. Uno de los casos más conocidos es el proyecto Madrid Río de la ciudad de Madrid. Dicho proyecto, cuyo objetivo principal era la integración del río Manzanares en la ciudad, ha conseguido revalorizar la zona en todos los aspectos.
Así, en la planificación urbana ha conseguido crear un pulmón en la ciudad que acoge una gran cantidad de biodiversidad. En el aspecto social se ha convertido en un punto de encuentro para familias, deportistas, turistas y vecinos. Y, económicamente ha supuesto un impulso a los barrios a lo largo del cauce por la atracción que supone. En este aspecto, por ejemplo, el antiguo cauce del río Turia a su paso por Valencia recibe más de tres millones de visitantes cada año siendo el tesoro verde de Valencia.
De manera similar, la ciudad de Zaragoza ha establecido un Plan Director de la Infraestructura Verde que busca la naturalización de la ciudad a lo largo del Ebro a su paso por la localidad. Y el río Besós de Barcelona pasó de ser el río más contaminado de Europa a ser hogar de más de 700 especies de flora y fauna.
De manera que, medir la calidad ambiental de tu municipio te permitirá evaluar el estado en el que tus ciudadanos se encuentran. Para ello, con la herramienta desarrollada por Green Urban Data podrás llevar a cabo acciones medioambientales, sociales, urbanísticas… en los puntos de tu municipio que lo necesiten de manera objetiva. Siendo capaz, además, de cuantificar los beneficios conseguidos.